Me sedujo el
canto del ensueño
Me atrajo la
pasión de lo desconocido
Vi de lejos
los anhelos cumplidos
Imagine el
bien en otros lares
Allí los
sueños serian realizables
Con fuerza
acometí la travesía
Sin calcular
lo imprevisto del camino
Había sed
por llegar a otra latitud
Dejar lo que
parecía una vida gris
Por una que
refulgiera como el iris
Encontrar
allí la seguridad perdida
Alcanzando a
la cumbre del éxito
Atrás dejaba
los sueños rotos
La esperanza
devastada por el tedio
La familia
en expectante espera
De ver cumplidos todos los sueños
Extrañando
los amigos de la infancia
Recordando
los lugares compartidos
Las calles
tantas veces recorridas
Añorando el
barrio tan conocido
Aunque el
corazón iba en agonía
Lo tomo la
mente con pausa fría
Porque donde
el cerebro manda
Las vísceras
son sujetas a obediencia
Recurriendo
al truco de la esperanza
Se taponó
todo resquicio de rebeldía
Enumerando
todos los resultados
No se dejó
espacio para retroceder
El éxito esta adelante, es el futuro
Y el fracaso quedo atrás, en el pasado.
Esas serán
siempre las ilusiones
De todo aquel
que ha emprendido
El viaje a
un lugar desconocido
Lo alimentan las opciones imaginadas
Las ideas de
encontrar el edén perdido
Tal vez
alcance metas perseguidas
Puede ser
que cumpla expectativas
No sin pagar
con creses la osadía
Al dejar en el
naufragio lo vivido
No te
podemos detener, tienes sueños
Alcánzalos y hazlos realidad en tu vida.
Por el
pastor: Fernando Zuleta Vallejo.
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