Las muchas aguas no podran apagar el amor, ni lo ahogaran los rios (Cnt.8: 7)
Pensando en este amor inexplicable me di cuenta que la cantidad de situaciones críticas, las dificultades extremas o la grandeza de los problemas, no menguan el amor. Las aguas en sus manifestaciones son usadas como una metáfora para dar a entender la imposibilidad de que las fuerzas activas de la naturaleza con su descomunal poderío tengan la capacidad de extinguir el amor. Ante el amor genuino aparecen como inocuas y débiles.
¿Cual es la razón? primero el amor aparece como fuego, sabemos que lo opuesto, su contraparte es el agua y un incendio se combate con agua, ¿ por que aqui aunque las aguas sean pródigas o abundantes no causan ningún efecto disuasivo al fuego que emerge del amor?
El fuego que surge de este amor no es producido por una combustión física, ese fuego no lo hace aparecer los elementos naturales. Emana del fuego del Espiritu de Dios, que es sobrenatural, por lo cual no exite nada terrenal que lo pueda apagar.No es fuego consumidor, es fuego purificador.
Dios es amor, ese amor no se acaba, el fuego que surge de él, no se apaga, por eso las aguas en abundancia, la multitud de dificultades o los ríos caudalosos no harán mella en él, debido a que todo lo que se pueda usar contra él, es perecedero
¿y que cosa finita, podrá destruir una infinita?
¿Que arma natural prevalecerá contra lo sobrenatural? El amor es uno de los materiales de que esta hecho Dios y Dios es eterno, por lo cual sus componentes también son eternos y siendo el amor uno de ellos, esa es la razón primordial para que sea inextinguible.
Si tu quieres vivir la eternidad con Nuestro Hacedor, la fórmula es sencilla: llénate del amor de Dios, practica ese amor y distribuye ese amor.
Por el pastor: Fernando Zuleta Vallejo.
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