Como conocemos muchas de las tendencias del ser humano, porque algo innato que tenemos es auto-analizarnos y analizar a los demás, con el fin de tener una mejor comprensión de quienes somos, justamente ese conocimiento, es el que emplean con argucias y argumentaciones los oportunistas de oficio para arrastrar a los incautos con ofrecimientos de cambios transcendentales en su vida, les ofertan por módicas inversiones, al compararlas con las ganancias que recibirán, si se asocian al negocio, porque para que la oferta sea más atractiva y tentadora, ya de entrada es socio con todas las de la ley y le hacen internalizar la idea poderosísima, de que esa es su compañía y que ese es su negocio, con este gancho espectacular crean en el promisorio e ingenuo prospecto un entusiasmo y euforia desmedida que verdaderamente muchos cambian su apariencia, vocabulario, mirando al mundo con desafío, porque ahora los sueños son de grandeza y de visión de altos quilates, su pensamiento es vamos a conquistar el mundo. ¡Kamikaze!
Este sistema es muy usado por las organizaciones que se llaman de multinivel, donde le presentan un plan, primero para capacitación personal que comienza con un taller, en un gran salón de un buen y prestigioso hotel, con muy buena atención, unos expositores extraordinarios y un costo individual no tan elevado, porque es necesario e imprescindible que siga viniendo a los demás, que se repetirán más o menos cada mes, pero en ese lapso de tiempo el prospecto ya debe de haber reclutado algunos cuantos, para que su negocio se levante rápidamente, porque entre más gente añada a su grupo, más rápido comenzaran las ganancias y más altas serán.
Un amigo mío me llego en una oportunidad con un tremendo negocio de esos, comenzó por hacer una proyección de lo que ganaría, en un determinado tiempo, cuando llegara a tal cantidad de personas en mi grupo personal, lo extraordinario de todo es que toda esa gente hipotética iba a trabajar para hacerme rico. Yo le hice un par de preguntas claves ¿Ya cambiaste de carro? Porque el cacharro que el usaba era un vieja y destartalada camioneta que lo único que no le sonaba era la radio y la corneta, una de las puertas tenía que amarrarla con un mecate, para que no se abriera cuando estaba rodando y así evitar un peligroso accidente, además las mangueras del radiador estaban fuertemente sujetadas con alambre y el capo trancado con una buena cadena, que terminaba con un candado. ¿Para evitar el robo? ¡NO¡ para impedir que el viento lo levantara cuando estaba en marcha. Al responder, que aun la conservaba, le hice la otra pregunta, ¿y cómo te apareces a esos lugares donde la gente habla de tanto dinero y además estas dando charlas sobre una prosperidad tan grande con un carro en esas condiciones? Me respondió muy sinceramente, yo la dejo a cinco cuadras del lugar de reunión y las camino a pie. No hubo necesidad de más interpelación, ni trato de seguir convenciéndome de que ingresara a tan fabuloso negocio.
Eso en esta clase opciones, pero hay otros vendedores de ilusiones, como los que colocan los avisos publicitarios en los periódicos, donde prometen a las personas que hagan los cursos que ofrecen empleo inmediatamente terminen, porque están afiliados o representan a una gran empresa en expansión o a alguna dependencia del gobierno que necesitan urgentemente personal entrenado ¡YA¡ cuando se presentan los primeros afortunados, les dan el día, la hora, el lugar y el costo, pero además se da la recomendación, que si conocen a alguna persona que no tenga empleo, por favor hágale llegar la información y así nos ayudan y ayudan a los demás. El resultado los estafan con un curso de unos quince (15) días y después de terminado, les hacen la promesa de que la próxima semana serán llamados, para el arranque y la ubicación, nunca se recibe esa llamada y cuando alguno llama a preguntar por el ofrecimiento, aparecen las causas más disimiles por las que todavía no ha comenzado las operaciones la fantasmagórica empresa, al fin los engrupidos se cansan de llamar y de esperar, y así quedan las cosas ¿porque quién se preocupa por desarticular esta caterva de estafadores?
Otro gran negocio lo tienen las agencias especializadas en conseguirle empleo a las domesticas y conserjes, también con avisos en la prensa, cuando llegan los necesitados de alguno de esos trabajos, inmediatamente son atendidos por solicitas y sonrientes secretarias, se llena una planilla con todos los datos dándole un toque de mucha seriedad y responsabilidad al asunto y aunque la promesa en la publicación habla de empleo inmediato, el argumento es el mismo, al fin de semana o por tardar al inicio de la próxima los llamamos, para que pase a cancelar por la caja, y el recibo que le damos, lo presenta como garantía cuando venga a tomar el empleo, porque si no cancela como podemos asumir los gastos del papeleo, las llamadas a los empleadores, etc. etc. ese es otro que de seguro le van a salir raíces esperando esa magnífica oportunidad. También otro bienhechor grupo de vendedores de ilusiones, son los que quieren hacernos millonarios con las loterías, chance, terminales y cualquier otra cantidad de ardides, que mengua cada vez más el ya exiguo presupuesto familiar, porque estos vicios llegan a causar tanta esclavitud que muchos permanecen en la indigencia porque los responsables de sostenerlos dejan todo su peculio en los bolsillos de los promotores y dueños de las casas de juegos, otro caso aparte son las apuestas en las carreras de caballos en los hipódromos, de lo cual llego a decir el insigne y desaparecido escritor, Dr. Arturo Uslar Prieti, “si en Venezuela las revistas hípicas fueran en ingles, seriamos un pueblo bilingüe,“ haciendo alusión a la gran cantidad de personas que las compran y las leen para recabar información sobre cada carrera.
Es solo para enumerar algunos casos de los vendedores de ilusiones, porque desafortunadamente se encuentran al por mayor y aunque es tan perjudicial y dañino la mayoría están avalados por las leyes de la República Bolivariana Soberana e Independiente de Venezuela.
Por el pastor: Fernando Zuleta V.
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