Si tienes la
necesidad imperante de conocer la opinión que otros tienen de ti, debe ser
porque lo que piensas de ti mismo no te agrada y quieres reforzar el ego con
conceptos aunque no sean reales, pero
si, lisonjeros.
Tenía una
tía que en su juventud era hermocísima, eso le subió muy alto el ego, y el
problema del engreimiento es que el tiempo lo alimenta y nunca lo desvanece.
Pasaron los años y ella siguió pensando que siempre era la mujer lozana y bella
de la juventud… un día que llegue a visitarla estaba echa un mar de lágrimas,
eso, me movió a inquirir sobre la causa de su lloro desconsolado y balbuciendo
más que hablando me contó la razón de su tragedia. Te acuerdas de fulana, era
una de las amigas de la adolescencia y juventud de ella, lo primero que pensé fue
es que había abandonado el mundo de los vivos, ella me interrumpió con furia y
odio manifiesto, diciendo: ojala se hubiera muerto y así no hubiera tenido que
oírla decir la sandez que me dijo y secándose las lágrimas, se acercó al espejo
y me pregunto ¿sobrino, es verdad que me veo vieja y muy fea? Como buen sobrino
y conocedor de su inclinación al narcisismo, le conteste: no tía, Ud. Luce
todavía joven y bella, la voz de la conciencia me reprocho esa valoración falsa
de los hechos, al decirme: ¡hipócrita de siete suelas!
Pero en
realidad la frase que uso la amiga de antaño, no fue, estas vieja y fea, tal
vez eso hubiera sido más tolerante para mi tía, sino que le espeto. ¡Carmen de
los Ángeles de Dios estas convertida en un escarramán!.
La vanidad
tiene la capacidad de hacernos mentir a nosotros mismos, porque es una supervaloración
del ego, que es lo contrario a la baja estima. Los dos son extremos, el primero
nos hace reclamar cualidades que no tenemos y el segundo nos hace declarar
defectos inexistentes.
Nunca debemos
proclamar lo que no somos, ni para enaltecernos con el orgullo, ni para descender
con la auto conmiseración. En ese caso
el equilibrio es esencial y recuerde que
no está en el centro, sino en los lados, así es que se puede tener buen
concepto de sí mismo sin caer en la egolatría y se puede saber cuales son
las limitaciones sin caer en la baja autoestima.
Digo, pues, a cada uno de ustedes por la gracia que me
ha sido dada, que nadie tenga más alto concepto de sí que el que deba tener;
más bien, que piense con sensatez, conforme a la medida de la fe que Dios
repartió a cada uno.(rom .12:3)
Posdata: escarramán
es un regionalismo antioqueño que
significa, feo en extremo, persona arrugada y de rasgos físicos que atemorizan.
Por el
pastor: Fernando Zuleta Vallejo
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