Una de las cosas que siempre mantiene ocupada la mente son los pensamientos, muy pocas veces dejamos de pensar mientras estemos conscientes, a veces se presentan lagunas mentales o algunos lapsus en los que puede quedar la mente sin recuerdos o en blanco, aunque ese fenomeno puede ser por patologías orgánicas, lo que pocos saben es que tambien puede ser un gravísimo problema espiritual.
En una época colmada de escepticismo, llevada a los excesos por el fanatismo libertino, creador de un desafortunado rechazo a lo sagrado y propulsor de la filosofía del hedonismo, pocas personas prestan atención a la parte espiritual.
Primero porque hay una mezcla de lo santo y lo profano, donde se hace casi imposible diferenciar la verdad de la mentira, segundo por la proliferación de la simonia, existiendo un grande número de mercaderes de la fe, que violentando todo principio bíblico crean ilusiones y falsas expectativas para captar la obtencion de prebendas y lucro en abundancia.
Esa metodología del mercantilismo aplicado al evangelio, no es otra cosa que la copia de las indulgencias católicas con nombres diferentes, como pacto, siembra, compromiso, y otros nombres que solo tienen distinto la forma de llamarse, siendo su fin y propósito igual, es el mismo perro con distinta guasca o como se dice en Venezuela: el mismo musiu con distinto cachimbo.( el mismo extranjero con distinta pipa de fumar)
La incredulidad acrecentada del presente tiene su caldo de cultivo en la multitud de individuos que tomaron por asalto los púlpitos cristianos para obtener enormes beneficios con la presentación de otro evangelio y como dice la Palabra de Dios: estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamo por la gracia de Cristo, para seguir otro evangelio diferente. No que haya otro, sino que algunos que os perturban y quieren pervertir el evangelio de Cristo. Mas si aún nosotros, o un ángel del cielo, os anunciara un evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema (maldito)( Galatas 1: 6 , 7, 8).
¿Qué queda para los que están predicando un evangelio diferente, para enriquecerse?
Este comportamiento reñido con la escencia del significado del ministerio Biblio y Cristo centrico ha echo un daño descomunal a la fe de millones de personas que creyeron y al descubrir que fueron con habilidad y astucia engañados, abandonaron su creencia renegando de su fe
Esta claro que los hombres usando el nombre de las deidades en que creen o han inventado para obtener beneficios personales de toda índole, como fortuna, fama, reconocimiento y seguidores, manipulan e inventan fantasías para que sus adlateres incondicionales los sigan, los adulen y los suban al pedestal sobrenatural, cuasi divino.
Dicen que son cristianos y que la Biblia es la Palabra de Dios, ¿qué hacen con enseñanzas tan claras, como cuando Pedro entro, salio Corneliose a recibirle, y postrandose a sus pies, adoro.Mas Pedro le levanto diciendo: levantate, pues yo mismo también soy hombre?.( Hechos 10: 25, 26) y el apostol Juan hizo lo propio con un ángel y este lo amonesto exigiendo que adorara solo a Dios.(Apocalipsis. 22: 8)
Cuando las Sagradas Escrituras dicen:Asi ha dicho Jehova: maldito el varon que confia en el hombre, y pone carne por su brazo, y su corazón se aparta de Jehová ( Jeremías 17: 5)) esta con absoluta claridad diciendo que quien se apoya en otro hombre para recibir la salvación es maldito, por la simple razón que un hombre pecador no puede conducir a otro a la salvación, esa confianza en otro igual de pervertivo acarrea maldición, porque lo que reciben es condenación, tanto el que toma el lugar de salvador, como el que lo sigue. ¿ existira una maldición peor que la perdición del alma?
Por otro lado el Señor Jesucristo dijo:¿acaso puede un ciego guiar a otro ciego? ¿ no caerán ambos en el hoyo? ( Lucas 6: 39).
Cambiar la gloria de Dios por recibir ingentes cantidades de dinero, es la peor elección de un hombre en esta tierra, esta entendido, claro, diafano y conocido por todo el mundo, que al partir de esta tierra , todo tenemos que dejarlo aqui ¿por qué entonces tanto afan por el dinero?
Para mi es simple la respuesta: el afan por tener bienes materiales, es porque el hombre es natural, en completa unión con las cosas físicas y terrenales, asi que piensa como un individuo de la tierra, su mente esta puesta en su totalidad en lo terrenal.
El hombre espiritual sabe a la perfección que vivir en la tierra es un accidente geográfico, que estar aqui es circunstancial y pasajero, porque el que hace la voluntad de DIOS permanece para siempre y que su verdadera ciudadanía esta en el reino de los cielos, por lo tanto su visión no es terrenal sino celestial, no trabaja por tener un futuro mejor, sino por mantener la salvación y la vida eterna. Nunca esta preocupado por las cosas materiales que se desgastan con el uso, sino por las espirituales que permanecen inalterables por la eternidad.
Trágica la decisión de ser rico para el mundo y pobre para Dios. El dilema se presenta por que hay que elegir entre adquirir bienes materiales para disfrutar aqui o acumular bendiciones espirituales en la eternidad, el asunto es que lo terrenal esta al alcance en cualquiera sea el momento y por lo tanto es en su totalidad tangible, visible y disponible; mientras los bienes espirituales, son por fe y como esta definidad en la Biblia: es, pues, la fe la certeza de lo que se espera y la convicción de lo que no se ve (Hebreos 11: 1) ella obtiene su cumplimiento en las promesas de Dios, las cuales son reales, sinceras y en su totalidad verdad, pero la mayoría son para la posteridad y para el disfrute de la vida eterna.
El asunto es que la única manera de disfrutar su ofrecimiento es creer en lo que asegura Dios manifestado en Jesucristo, y que esta registrado en la Biblia, todas sus promesas son ciertas, la dificultad surge cuando encontramos demandas, es decir mandatos que es inevitable cumplir y por pretender vivir bajo nuestros propios patrones y decisiones, dejamos a un lado la verdad de Dios cambiandola por lo fraudulento y espurio del hombre.
Los deseos se perciben por medio de los sentidos físicos y todo percepción sensorial son sentimientos surgidos del corazón, el cual es el centro de la voluntad del ser humano, aquí no se trata del órgano que bombea la sangre para distribuir el oxigeno por todo el cuerpo, sino del lugar donde se originan las emociones. Cuando la Biblia dice: con los labios se confiesa para salvación y con el corazón se cree para justicia, ( Romanos 10: 10) esta indicando la necesidad de sincronizar lo exterior ( las palabras)con lo interior ( la voluntad) porque debe haber armonia entre lo que se expresa y los sentimientos.
Lo que se cree con el corazón debe ser aceptado con la mente y esta lo trasmite al organo fonador para su confirmación, de manera que tiene que existir coordinación entre creer, aceptar y comunicar, lo que el corazón cree, la mente lo admite y la lengua lo refrenda.
Eso significa estar en armonía consigo mismo, es igual a la coordinación de la mente con la acción para cualquier movimiento voluntario del cuerpo humano, si vamos a caminar, el cerebro da la orden, los músculos motores se activan y se ejecuta la acción, todo en completa coordinación, siempre y cuando todo este funcionando con normalidad.
El asunto es que Dios, usa individuos para transmitir su voluntad, escrita y determinada en la Santa Biblia, los utiliza para comunicar esas verdades de manera práctica y entendible y por tal razón da dones a la iglesia manifestados en personas con ministerios diferentes para que la multiforme gracia de Dios se manifieste en divercidad, pero en unidad total. El problema surge cuando la avaricia aguijoneada por el orgullo se desvía del camino trazado por El Gran Yo Soy y termina alejándose de la verdad, creando su via personal, cumpliendose inexorable la sentencia Biblica: hay camino que al hombre le parece derecho; pero su fin es camino de muerte.( Proverbios 14:12), el peor resultado de este asunto es que los farsantes no entran ni dejan entrar a sus seguidores; como esta escrito: ¡hay de vosotros intérpretes de la ley! Porque habéis quitado la llave de la ciencia; vosotros mismos no entrasteis, y a los que entraban se lo impedisteis.(Lucas. 11: 52).
¿Hay algún parecido con muchos de los que se llaman ministros del evangelio de hoy en dia?
Pueden preguntarle a la innumerable proliferación de apóstoles, ¿ cuales son los requisitos Biblicos para ser apóstol y cuantos niveles de apostolado existen? Tal vez sus respuestas, si las tienen, le aclaren lo fraudulento de su pretencion.
¡saque sus propias conclusiones!
Bendiciones.
Por el pastor: Fernando Zuleta Vallejo.