Es un estado definido como la
situación más paupérrima a la que puede llegar el ser humano, por cuanto pierde
toda la capacidad de amarse así mismo, el interés y el aprecio por la vida, con
una valoración de sí mismo por debajo de cero, un indigente pierde la esperanza
y las motivaciones, llegando a la fatal conclusión de que no le importa a
nadie, que nadie lo ama, por lo cual a él,
no le importa nadie, ni ama a nadie, por lo tanto se odia a sí mismo y enfila
todos su s esfuerzos y la capacidad de
que pueda disponer para auto-destruirse.
Con las personas en estas
circunstancias, no es aconsejable mostrarles conmiseración, eso lo detestan,
porque por asombroso que parezca lo único que les acompaña perennemente es el
destructivo orgullo y se dan cuenta muy rápidamente si Ud. siente por
ellas lastima o misericordia. Este
extraño comportamiento obedece al convencimiento a que han llegado, de
que son un desecho de la sociedad y verdaderamente no están muy lejos de la
realidad ¿Por qué pueden tener este pésimo concepto? Solo por ver la actitud
que el grueso de las personas tienen
hacia ellos, de cómo los evaden, de cómo los rechazan y de cómo los desprecian
y los vejan cuando tienen la oportunidad.
Sin embargo la definición de los
sociólogos, es que es un individuo que no tiene los medios económicos para
proveerse de todo lo elemental para la subsistencia (vestido, vivienda,
educación, salud, distracción, etc.etc.). Pero mayormente este no es un
problema únicamente estructural y externo, sino mental e interno que involucra
al individuo integralmente y no solo en la parte económica, pues muchos tendrán acceso al dinero más que suficiente
para vivir con dignidad, pero la ausencia de luz en sus vidas los hace andar en
la oscuridad, aunque tengan el mismo sol y la electricidad que produce la luz
artificial de que todos podemos disponer
y económicamente estén bien, la falta de la verdadera luz, que es la luz
espiritual que produce Dios por medio de Jesucristo, hace que anden en las más
completas tinieblas. Y no hay peor
indigencia que la falta de Dios en la vida de las personas.
Este cuadro se vendió por 119,9 millones de dolares en Nueva york, ¿no es esto la mayor muestra de pobreza espiritual? De manera que ser un indigente no
es solo vivir en la calle y estar en una condición miserable monetariamente, la
peor es la de tenerlo todo materialmente y nada espiritualmente; ser
inmensamente rico para el mundo y extremadamente pobre para Dios. Leí una
anécdota del hombre opulento que le
entrego una cesta sucia y llena de basura a un indigente y este se la acepto y
la limpio y llenándola de hermosas flores se la trajo de regreso, extrañado el
personaje le pregunto ¿Por qué haces esto? A lo que el indigente respondió:
"cada uno da lo que tiene en el corazón". La pregunta ineludible es ¿en la anécdota, quién era el
verdadero indigente? Para culminar citare la Palabra de Dios textualmente:
porque tú dices: yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo
necesidad; y no sabes que tu eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y
desnudo. (Apo: 3:17).
Por el pastor: Fernando Zuleta V.
No hay comentarios:
Publicar un comentario